Concebir el tatuaje como un arte es algo natural puesto que ha ido evolucionando con el paso de los años, y en la actualidad se ha convertido en una forma de expresión e incluso en una auténtica obra de arte. Sin embargo, para conseguir buenos resultados, es importante que hablemos de la adaptación del tatuaje al cuerpo, y es que debemos pensar en las formas de nuestro lienzo e incluso en el movimiento que le imprimimos a lo largo del día.

La importancia de la dimensión del tatuaje y su relación con el cuerpo
Está claro que no es lo mismo hacer un pequeño tatuaje en una falange del dedo que sobre la espalda o incluso sobre una de las zonas más complicadas que son las piernas, de manera que este es un elemento clave a considerar a la hora de analizar la adaptación del tatuaje al cuerpo.
Cuando se trata de tatuajes ubicados en zonas con muchas curvas y/o con mucho movimiento, conseguir una correcta adaptación se convierte en algo verdaderamente complicado.
De hecho, para conseguir buenos resultados con tatuajes en estas zonas es muy importante que nos pongamos en manos de tatuadores profesionales, o de lo contrario, los resultados pueden ser catastróficos.
El objetivo principal de un tatuaje es conseguir atraer las miradas, ofreciendo una estética diferente y sobre todo utilizarlo como una forma de revelación de nuestra personalidad, y para conseguirlo, todas las formas, estructura y detalles deben ser mimados al milímetro.
El problema de las plantillas en tatuajes grandes
Cuando un cliente va a un gabinete de tatuajes, es muy habitual que le enseñen algunos ejemplos de diseños ya realizados, o le propongan la creación de uno nuevo y diferente.
En muchos casos, lo que se hace es dibujar una plantilla que será la que nos sirva como eje principal para la realización del dibujo, y es que una vez que nos ponemos a pintar sobre el cuerpo, el inconveniente es que no hay goma de borrar que funcione, por lo que un pequeño error puede tirar al traste una gran obra de arte.

Las plantillas pueden ser muy útiles sobre todo si se trata de tatuajes pequeños que se realizan en zonas del cuerpo más sencillas, con pocas curvas o sin un excesivo movimiento, ya que de esta forma se puede dimensionar adecuadamente el dibujo en la plantilla plana, sin tener que hacer modificaciones sobre la piel.
Pero cuando se trata de cubrir zonas más complejas, con muchas curvas y mayor movimiento, la plantilla puede incluso entorpecer el trabajo a la hora de adaptar el dibujo a la realidad del lienzo, es decir, a sus formas y marcas normales.
El tatuador experto y su capacidad para adaptarse a las formas del cuerpo y al movimiento
El tatuador experto está capacitado para conseguir adaptarse plenamente tanto a las formas del propio cuerpo como al movimiento, desarrollando cualidades para los cuatro factores siguientes:
- Cada parte del cuerpo presenta unas particularidades y unas formas diferentes.
- Cada persona es distinta, y es que para nada es lo mismo tatuar la pierna de un hombre que la de una mujer, o la de ese hombre que tenemos enfrente y la del que tenemos a nuestra derecha, observando en cada caso un lienzo completamente nuevo y diferente, con formas y características únicas.
- Cuando se trata de tatoos grandes que cubren zonas completas, podemos tener que hacer frente a cambios en el enfoque del dibujo para una adecuada adaptación al observador.
- Hay que tener muy en cuenta el movimiento en cada parte del cuerpo que se vaya a tatuar, logrando de esta forma que el tatuaje no pierda su sentido, su calidad o sus características originales.
Esto no quiere decir que no se pueden utilizar plantillas, ya que esto es algo particular de cada tatuador, pero es muy importante tener la seguridad que, tanto con plantilla como sin ella, es esencial ponernos en manos de un profesional que tenga la capacidad para adaptarse a la forma de nuestro cuerpo y al movimiento, logrando dar lugar a una creación única y exclusiva que alcance a convertirse en una auténtica obra de arte.